La historia se centra en Gilda, una mujer que no puede dejar de pensar en la muerte. Desesperada por aliviar su mente ansiosa y alienada de su familia represiva, responde a un volante para terapia gratuita en una iglesia local y se encuentra abruptamente contratada para reemplazar a la recepcionista fallecida, Grace. A pesar de ser queer y atea, se encuentra tratando de aprender sobre la misa, ocultando a su posible nueva novia e investigando la muerte de Grace, todo mientras intenta evitar revelar la verdad de su existencia mortificante.
El libro es una mezcla de calidez, humor seco y observaciones acertadas sobre la condición humana. Everyone In This Room Will Someday Be Dead es una exploración chispeante de lo que se necesita para mantenerse a flote en un mundo donde tu expiración - y la de aquellos que amas - es la única certeza. A lo largo de la historia, la autora aborda temas como la muerte, la ansiedad y las preocupaciones cotidianas con un toque de humor y amabilidad, haciendo que la historia sea a la vez conmovedora y divertida.