Monstruos invisibles (Contemporánea) es una impactante obra que profundiza en la transformación y identidad personal de su protagonista, Shannon McFarland. Anteriormente una modelo hermosa, Shannon ahora enfrenta una existencia destrozada por un accidente de coche devastador que le robó su belleza.
Con su rostro irreconocible y viviendo en aislamiento, Shannon conoce a dos personajes clave, Brandy Alexander y Manus Kelley. Brandy, un drag queen exuberante que sueña con la perfección femenina y Manus, un testarudo seductor que oscila entre el amor y el rechazo, le dan a Shannon la oportunidad de redefinir su vida y explorar su identidad desde una perspectiva nueva y liberadora.
Agregar profundidad a la trama, la historia está entrelazada con varias subtramas que exploran temas como el consumismo compulsivo, la hipocresía de la belleza física, el género y las tensiones sexuales. Con un estilo narrativo no lineal, el libro juega con la cronología y las expectativas del lector, resultando en una lectura agridulce pero fascinante.
A lo largo de la novela, Shannon se embarca en una ardua batalla entre abrazar su identidad o sumergirse en la autocompasión; una lucha que se ve complicada aún más por problemas familiares y la tensión sexual con Brandy. A medida que la historia avanza y las capas de sus personajes se descubren, Shannon encuentra finalmente una manera de reconciliarse con su nueva vida y encontrar la fortaleza para ser ella misma.
La obra termina en una nota optimista y empoderadora, sugiriendo que, si bien atravesar adversidades puede ser indudablemente doloroso, también puede ser liberador. A través de Monstruos invisibles (Contemporánea), se ilustra que incluso en circunstancias aparentemente imposibles, la liberación y la autoaceptación son posibles.
En resumen, Monstruos invisibles (Contemporánea) es una historia profunda y cautivadora sobre la identidad, la transformación y la valentía para aceptarse a uno mismo, incluso frente a las adversidades más desafiantes.