El libro The Picture of Dorian Gray cuenta la historia de un joven llamado Dorian Gray, quien es retratado por un talentoso artista llamado Basil Hallward. Durante una sesión de pintura, Dorian conoce a Lord Henry Wotton, un hombre influyente y hedonista, quien tiene una profunda influencia en su vida.
Bajo la influencia corruptora de Lord Henry, Dorian se obsesiona con la idea de la belleza y la juventud eternas. Mientras observa su retrato, Dorian se da cuenta de que su belleza física se desvanecerá con el tiempo, mientras que el retrato siempre mantendrá su juventud y hermosura. Dorian, en un momento de desesperación, desea que sea el retrato quien envejezca en su lugar, mientras él mantiene su juventud y belleza para siempre.
A partir de ese momento, el retrato de Dorian se convierte en una representación de su alma, y mientras él se entrega a una vida de excesos y depravación, el retrato muestra los efectos de sus acciones: envejece, se corrompe y se vuelve grotesco. Dorian, por otro lado, parece inmune a las consecuencias de sus actos y continúa viviendo una vida de placeres desenfrenados.
A medida que pasa el tiempo, Dorian se ve envuelto en una serie de eventos trágicos y destructivos, que afectan a las personas que lo rodean. A medida que su depravación aumenta, su consciencia se va desvaneciendo y su vida se convierte en un torbellino de indulgencia y crueldad.
Finalmente, Dorian no puede soportar la imagen reflejada en el retrato y, en un acto de desesperación, decide destruirlo. Al hacerlo, su propio cuerpo envejece y se degrada rápidamente, y muere justo en el momento en que el retrato recupera su belleza original.
La novela de Oscar Wilde plantea preguntas sobre la naturaleza del pecado, la moralidad y la doble vida. A través de la historia de Dorian Gray, Wilde critica la obsesión por la belleza y la vanidad, y reflexiona sobre las consecuencias de una vida basada en el placer y la falta de ética.